viernes, 29 de marzo de 2013

La pluma


Me gusta que salgan palabras de mí.
Es una sensación hormigueante.
Sé que yo no soy su dueña.
Aparecen en turba,
se ponen a hacer ruido
y tengo que dejarlas salir
de inmediato.
No es que yo sea una mística.
Simplemente pienso
que un espíritu me posee.
¡Le entran unos arrebatos!
Entonces, las palabras
empiezan a brotar de mí.
Y eso es un don.
A veces, es un parto difícil.
Hay que animar a las palabras
a escalar a las alturas del papel
con esfuerzo y disciplina.
Con todo, yo estoy encantada.
Escribir es un arte,
y yo me siento orgullosa.

5 comentarios:

  1. ¡Qué bello, Juan! Por fin volvió tu pluma por acá...
    Abrazo grande.

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  2. Gracias. Tu comentario me pone contento. Otro abrazo muy grande para ti.

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  3. ¡Qué bueno volver a leerte, Juan! Gracias por este poema.
    Abrazos.

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  4. Gracias también a ti, Ana. Qué gusto contar con buenos amigos. Una sonrisa.

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  5. ...palabras que vienen bien, Juan...
    Abrazo y sonrisas...

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