miércoles, 30 de diciembre de 2015

Agradecimiento


Gracias por el milagro
por hacer crecer su vientre
gracias por la vida
juntos uno del otro.
Gracias por el contacto
por la gente hermosa a mi alrededor
por mis manos en sus mejillas
por mi cabeza en su hombro
por sus abrazos.
Gracias por el estímulo
por el afán de saber, por la inquietud
por darme la fuerza para luchar
para cumplir mis sueños.
Gracias también por los errores, por los tropiezos
por las dudas, por las incertidumbres
gracias por haber podido sacar de todo ello
el máximo provecho.
Gracias por las experiencias transformadoras
que me han arrojado a un nuevo comienzo
que me han ayudado a cerrar heridas
a desterrar la guerra conmigo mismo.
Gracias por ser consciente de lo esencial
y gracias por lo completamente superfluo
capaz de alimentar la felicidad.
Gracias por el viaje a Islandia
gracias por los momentos de calma
tranquilos, serenos, confiados.
Gracias por la poesía
gracias por todo lo que he escrito
por lo que estoy escribiendo ahora
y por lo que me hubiera gustado escribir
y que quizá escriba más adelante.

Gracias amigo
lo he pasado muy bien, de verdad.
Has sido un año bueno y generoso.
Este poema es para ti
con mi agradecimiento.

domingo, 6 de diciembre de 2015

Tal vez


Tal vez te sientas diferente,
tal vez sientas
que tienes ganas de vivir,
que estás bien
que te encuentras a gusto,
puedas sentir el calor
y el olor perfumado de tu ropa
sobre tu piel,
sentir la dulce distensión de tus músculos,
tal vez te sientas liberado
de toda angustia
nada de qué preocuparte
ninguna traba impuesta por la sociedad
como ganarte el sustento
con el sudor de tu frente,
tal vez sientas
que no hay nada pendiente
ninguna posibilidad de error
ni de peligro,
tal vez sientas que no pasa nada
salvo el tiempo
instante tras instante
con regularidad
o tal vez prefieras que dure más
y pase elegantemente
con relatividad,
tal vez sientas que el presente
está bien así
que tiene algo de especial
y tal vez te quedes quieto
como si hubieses encontrado
un refugio de felicidad,
tal vez pienses
que el espectáculo del presente
con toda la exuberancia de lo ordinario
es lo más importante
y tal vez pongas una mano sobre tu corazón
y sientas como late
y tal vez tengas la visión
de tu propia sangre circulando
desde tu cabeza a tus pies
llevando el oxígeno
a cada una de las células de tu cuerpo
y tal vez notes el vacío
como una semilla
que ha debido de echar raíces
muy adentro de ti
y crece
y tal vez no te precipites a hacer algo
y tal vez te dejes en paz
y te despojes de todas tus cargas
de tus múltiples esfuerzos
y tal vez finalmente
pueda ocurrir
que estés contento contigo mismo
simplemente porque existes.
Tal vez,
solo tal vez.