Adiós poesía,
querida compañera,
deliciosa amante.
Me voy un tiempo por ahí
a andar por mi cuenta,
a perderme en otros afanes.
No me pongas morritos,
corcita mía,
ni me mires con esos ojitos
que me derriten.
Déjame ir ya,
sé buena.
Ve a divertirte con otros poetas.
No voy a perderme,
regreso pronto,
puedes estar segura.
Tú sabes mejor que nadie
lo que hay entre nosotros,
así que no desesperes.
Adiós poesía.
Qué lo pases bien sin mí.
Vuelve pronto!
ResponderEliminarGracias, Mar.
ResponderEliminarRecuerda el tutlo del blog: "Regreso".
Una sonrisa.