Garcilaso,
alúmbrame el vuelo
oxigéname de ti
transfusióname tu poesía
de la que soy adicto,
necesito una dosis
de amor arrebatado
como el tuyo,
levántame y ándame
poéticamente
con todos los percances del amor
del que tú has escrito como nadie,
escrito está en tu alma
todo cuanto yo deseo
escribir.
Sé que entiendes mi hambre
que sigue siendo grande, sin fondo
que no se cura
pero qué importa
si me permite ser metáfora
de amor.
Garcilaso,
alúmbrame el vuelo
renáceme de ti,
aunque duela.
